31 Oct Contaminación cruzada
Si has llegado hasta aquí y aún no sabes a qué hace referencia el término «contaminación cruzada» te invitamos a descubrirlo en nuestro post y a saber cómo evitarla con unos simples consejos.
La contaminación cruzada es el proceso por el que un alimento inicialmente libre de gluten lo adquiere al entrar en contacto con elementos que sí lo contienen.
Existe posibilidad de contaminación en cada uno de los procesos de manipulación de un alimento, desde la elaboración, el almacenamiento e, incluso, en el momento de servirlo.
De este modo, tanto los productos que son libres de gluten por naturaleza (legumbres, verduras, frutas, lácteos, etc.) como los productos “bajos en gluten” son sensibles a una contaminación cruzada si no se manejan con atención y rigor.
Te listamos algunos consejos que, sin duda, te ayudarán a tener un mejor control de los alimentos para evitar el riesgo de contaminación cruzada:
- Evita preparar los alimentos sin gluten en la misma superficie utilizada para preparar los alimentos con gluten. Si no es posible, empieza a trabajar los alimentos sin gluten y, sólo cuando hayas acabado, pasa a los alimentos con gluten.
- Si manipulas alimentos con gluten, limpia siempre a fondo el espacio de trabajo cuando hayas terminado y recogido los alimentos y utensilios, especialmente si luego debes manipular alimentos libres de gluten.
- Evita cucharas y tablas de madera que también se utilizan para preparar o cocinar alimentos con gluten. El plástico y el metal son más seguros. Si puedes, utiliza utensilios de cocina exclusivos para los productos sin gluten.
- Utiliza una tostadora sólo para los alimentos sin gluten. Si no cuentas con más de una tostadora, puedes usar bolsitas para tostadoras, así protegerás el pan de la contaminación cruzada.
- Evita las bolsas utilizadas para los alimentos no envasados. Las bolsas que se utilizan pueden haber sido usadas o haber estado en contacto con otros alimentos que sí tienen gluten.
- Si eres de los que prepara sus propias harinas, utiliza un tamizador exclusivamente para las mezclas sin gluten. Este tipo de utensilio, como el colador, es un foco de contaminación importante.
- Presta especial atención a las cremas, mermeladas, jaleas, patés y productos de este tipo. Cuando se comparten este tipo de untables, es muy fácil que se contamine con otros productos que puedan contener gluten. En este sentido, hablamos de la Regla de “No untar dos veces”: un cuchillo o espátula que ha estado en contacto con pan o un alimento con gluten, no puede ser usada otra vez para los alimentos sin gluten.