15 Jun Compartir de nuevo
Tras semanas sin ser posible, ya podemos planear compartir mesa para disfrutar de una buena comida en compañía de amigos y familiares.
Cuando compartimos mesa personas con y sin celiaquía, lo ideal es servir a todos los invitados alimentos libres de gluten. Como en ocasiones esto no es posible, hoy os vamos a recordar algunos consejos para que todos podamos disfrutar sin riesgos.
Antes de ir a comprar
Con el fin de evitar cualquier imprevisto, es recomendable planificar con antelación el menú que vamos a ofrecer a nuestros invitados y elaborar una lista de la compra detallada.
Mientras hacemos la compra
Para aquellos productos manufacturados en los que pueda ser necesario, es importante asegurar que los alimentos que vamos a incluir en nuestro menú hayan sido identificados como libres de gluten.
Para estar seguros, recomendamos que el producto incluya en su envase o etiqueta un sello de garantía que lo identifique como SIN GLUTEN como, por ejemplo, el símbolo de la espiga barrada regulado por la AOECS (Sociedad de Asociaciones de Celíacos de Europa):
Al llegar a casa con la compra
Es importante el correcto almacenaje de los artículos sin gluten en las estanterías superiores de la despensa o del frigorífico para evitar que les caigan restos de otros alimentos encima.
Asimismo, es recomendable identificar mediante etiquetas los alimentos “sin gluten” para prevenir posibles equivocaciones.
Antes de preparar nuestro menú
La higiene personal es fundamental, las manos deben estar perfectamente limpias y la ropa de cocina como, por ejemplo, el delantal, las agarraderas o los guantes de tela.
La higiene en la cocina es muy importante y es por este motivo que debemos limpiar concienzudamente, con agua y jabón, todas las superficies, tablas de cortar, platos y demás utensilios de cocina que vayamos a utilizar.
En ningún caso, usar la misma cuchara o utensilio para remover alimentos con y sin gluten.
No utilizar utensilios de madera ya que, ese material poroso y podría contaminar los alimentos. Utilizaremos preferiblemente utensilios de metal o silicona.
Usar saleros, especieros y azucareros con los que no sea necesario dosificar el ingrediente con la mano.
Elaboración del menú
Siempre que sea posible, prepararemos primero los alimentos sin gluten y los reservaremos aparte.
En caso de no ser posible, es necesario taparlos para evitar salpicaduras que los podrían contaminar.
Recuerda no reutilizar aceites o agua donde previamente se haya cocinado con gluten.
Si vamos a utilizar el horno, es muy útil usar bolsas especiales que aislarán el alimento ya que los ventiladores de estos electrodomésticos facilitan el movimiento de pequeñas partículas que acabarían contaminando los alimentos sin gluten.
En el caso de que debamos usar el microondas, es recomendable tapar siempre los alimentos antes de cocinarlos, si vamos a utilizar gofreras o sandwicheras, éstas deben ser de uso exclusivo “sin gluten”. Y si usamos tostadoras de uso exclusivo o bien con las bolsas especiales.
Sentados en la mesa
Situaremos al invitado o invitados celíacos cerca de los alimentos sin gluten, alejando en la medida de lo posible el resto de los alimentos.
Evitaremos que los alimentos con gluten pasen por encima de los que no lo tienen.
Colocaremos cubiertos para servir las raciones en todos los platos, de esa manera evitaremos que el mismo cubierto sea empleado para servir alimentos con y sin gluten.
Si vas a ofrecer a tus invitados productos para untar, como quesos, mantequillas o mermeladas, decídete siempre por porciones individuales, o aplica la “regla del 2”: 2 platitos para cada untable, diferenciados, y cada uno con su cuchillo para que no se use uno que anteriormente se ha usado para untar alimentos con gluten.
Siguiendo estas indicaciones, podréis disfrutar de una buena comida sin correr riesgos y CON la mejor compañía.